lunes, 29 de agosto de 2011

El valor de la economía de la creatividad

Por Josean Feliciano
Vicepresidente de YDA-PR y profesor universitario

En una columna anterior iniciamos la discusión de la economía de la creatividad, la cual está compuesta por una amplia gama de actividades económicas dirigidas a la generación o la explotación del conocimiento y la información.

En el 2003, en una reunión celebrada en Memphis, se creó un manifiesto sobre la economía de la creatividad, que a su vez se convirtió en un llamado a la acción para (1) cultivar y recompensar la creatividad; (2) invertir en el ecosistema creativo, que incluya el arte y la cultura, la vida nocturna, la música, los restaurantes, los artistas, diseñadores, innovadores, emprendedores, la espiritualidad, la educación, entre otros sectores. También (3) abrazar la diversidad; (4) cuidar de las personas creativas; (5) valorar la asunción de riesgos, desafiando la sabiduría convencional; (6) ser auténtico, atreverse a ser diferente y resistirse a la m o n o cu lt u ra .

En el manifiesto también se insta a (7) invertir en calidad de ubicación y fomentar espacios abiertos y espacios verdes; (8) eliminar las barreras a la creatividad como la mediocridad, la intolerancia y el crecimiento urbano desenfrenado.

IMPACTO ECONÓMICO De acuerdo al Informe sobre la Economía de la Creatividad 2010, publicado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, las exportaciones mundiales de bienes y servicios creativos (productos como piezas artísticas y artesanales, el material audiovisual, los libros, las obras de diseñadores, las películas, los nuevos medios de comunicación y la prensa escrita, entre otros, se duplicaron entre 2002 y 2008. El valor total de estas exportaciones alcanzó los $592,000 millones en 2008 y, en promedio, la tasa de crecimiento de la industria durante esos años se cifró en un 14%.

En el informe también se destaca que las industrias creativas tienen un gran potencial para los países en desarrollo que pretenden diversificar sus economías y participar en uno de los sectores más dinámicos del comercio mundial.

También sostiene que la producción y el comercio de bienes creativos, con un apoyo adecuado por parte de los gobiernos y las alianzas público-privadas, podrán diversificar las economías de los países en desarrollo, crear una amplia variedad de puestos de trabajo y alentar la innovación. Añade el informe que es preciso disponer de marcos institucionales y reglamentarios apropiados para establecer un "lazo creativo" que atraiga a inversores, tecnología y empresas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario